Cómo funcionan los invernaderos fotovoltaicos

Cómo funcionan los invernaderos fotovoltaicos

¿Te gustaría instalar un invernadero fotovoltaico en tu hogar o quieres conocer más datos sobre este tipo de tecnología? En este artículo te contamos qué es, cómo funciona y cómo puedes instalar un invernadero fotovoltaico de forma cómoda y segura. Descubre por qué este tipo de invernadero es el futuro para agricultores y productores, cómo funciona y cuáles son todas sus ventajas respecto a los invernaderos tradicionales.

Cómo funcionan los invernaderos fotovoltaicos

Los invernaderos fotovoltaicos han aparecido fruto de la innovación y la investigación en las empresas de la industria auxiliar a la industria de la agricultura que están buscando nuevas fórmulas para conseguir una óptima rentabilidad en todas sus explotaciones agrícolas en invernaderos.

Como nos explican desde SolarPlak, los invernaderos fotovoltaicos funcionan como el resto de invernaderos sólo que además de poder usarse para el cultivo de todo tipo de plantas también permiten acumular energía térmica en sus diferentes superficies opacas y también en el suelo. Esta energía se libera después por las noches consiguiendo mantener las temperaturas perfectas para el cultivo de todo tipo de plantas y vegetales.

Así, los invernaderos fotovoltaicos o solares son una especie de estructuras totalmente cerradas en el lado norte o en la latitud norte, y en algunos casos también están cerrados en las partes oeste y este con cerramientos que tienen forma opaca, como por ejemplo cerramientos de ladrillo o de hormigón.

En cambio en su lado sur estos invernaderos se encuentran cerrados con cerramientos que son trasparentes como el cristal, las láminas de policarbonato o de polietileno, etc. que permiten el cierre con cortinas aislantes por la noche.

Por otro lado, los invernaderos fotovoltaicos pueden funcionar también convirtiendo los tejados de este tipo de invernaderos en plantas especialmente preparadas para generar energía solar. Sin duda se trata de una gran alternativa para conseguir producir energía limpia e incluso para reducir los costes de producción de las explotaciones agrícolas volviéndolas mucho más sostenibles y ayudando a los agricultores y productores a optimizar el terreno.

Los invernaderos fotovoltaicos permiten conseguir un rendimiento óptimo como energía eléctrica que puede usarse para el autoconsumo e incluso se puede vender a las compañías eléctricas ayudando a los propietarios del invernadero a conseguir algunos ingresos extra y sirviendo también de forma muy eficiente para amortizar cómodamente la inversión inicial.

Los expertos recomiendan la instalación de este tipo de invernaderos porque contribuyen al desarrollo de líneas estratégicas como la reducción de la dependencia de los contaminantes combustibles fósiles, a la creación de energía renovable y limpia y al fomento, por ejemplo, del autoconsumo eléctrico.

Los invernaderos fotovoltaicos cuentan con una óptima adaptabilidad en cuanto a la geometría del terreno con lo que pueden ubicarse prácticamente en cualquier lugar. Además, este tipo de invernaderos permiten evitar los costes de calefacción que se necesitarían en cosechas de primavera para poder adelantarlas o en cosechas de otoño para poder atrasarlas.

Otra de las principales ventajas de los invernaderos fotovoltaicos es que pueden ubicarse cómodamente en la pared de una granja, de una nave agrícola o de todo tipo de construcciones agroindustriales. Un invernadero permite la instalación de ventanas de forma totalmente lateral.

Por otro lado, entre los principales inconvenientes de instalar un invernadero encontramos que el área que queda disponible solamente o únicamente para el cultivo siempre va  a ser menor que en los invernaderos más clásicos. Por otro lado, los costes de los invernaderos fotovoltaicos siempre son más altos porque se deben construir diferentes cerramientos opacos con ladrillo u hormigón para conseguir que el invernadero sea un éxito y este tipo de invernaderos siempre son más caros que los de túnel o los de tipo parral.